No todo vale en el deporte

El partido de fútbol jugado en el Nou Camp, partido de vuelta de la Supercopa de España, entre el FC Barcelona y el Real Madrid alerta de los factores negativos que condicionan y desvirtúan los valores que reporta el deporte y su práctica en general. Los hechos que se produjeron, poco edificantes y antideportivos, se vienen repitiendo, desgraciadamente, con demasiada frecuencia e inciden de una manera negativa en nuestros niños y niñas.

La excesiva repercusión mediática y su influencia en la sociedad, donde el “vale todo”, se antepone al desarrollo de los valores propios del juego, en este caso el fútbol profesional. Además, hacen traspasar una línea que delimita y concreta las posibilidades que ofrece el deporte como medio y estrategia de favorecer hábitos de práctica regular y continuada de actividad física, transmisión de valores…

Se deben erradicar todo este tipo de conductas que enturbian y ensucian el deporte como marca de prestigio de España en el exterior. Excelencia conseguida a través del tiempo con el trabajo y esfuerzo de todo nuestro sistema deportivo y de los que lo hacen posible, instituciones públicas, federaciones deportivas, entidades y clubes, técnicos y deportistas… Y, sobre todo, reflexionar en el daño que se le hace a los más jóvenes, para los que el deporte espectáculo ejerce un mimetismo y que, en el caso que nos ocupa, no ha sido el más ejemplarizante.

Se deberá dar continuidad a todas aquellas iniciativas que promuevan y fomenten el juego limpio y los valores que conlleva el deporte como fórmula de apoyo a su educación. En este sentido, el ejemplo de los componentes del equipo infantil del Sevilla FC, y a la cabeza su entrenador, que supieron anteponer el valor del juego al resultado es un ejemplo del camino a seguir.

Antonio Montalvo de Lamo, Subdirector General Adjunto del Consejo Superior de Deportes