El sedentarismo infantil podría causar depresión en la edad adulta

El trabajo ha sido publicado en la prestigiosa revista Lancet Psychiatry. Los autores señalan que los adolescentes que tienen una actitud sedentaria durante una gran parte del día tienen un mayor riesgo de sufrir depresión incluso a los 18 años, un riesgo que aumenta con la edad.

Según los resultados obtenidos, cada 60 minutos adicionales de comportamiento sedentario por día a los 12, 14 y 16 años se asociaba con un aumento de 11,8, 8 y 10,5%, respectivamente, de padecer esta enfermedad psiquiátrica en la mayoría de edad. Por el contrario, cada hora adicional de actividad física ligera al día, en las mismas edades, se asoció con puntajes de depresión más bajos.

Aaron Kandola, investigador del University College de Londres, explica que “descubrimos que no solo las formas de actividad más intensas son buenas para la salud mental, sino cualquier grado de la actividad física que puede reducir el tiempo que pasamos sentados es probable que sea beneficiosa". Añadió que "deberíamos alentar a las personas de todas las edades a moverse más y sentarse menos, ya que es bueno para nuestra salud física y mental".

La depresión afecta a alrededor de 300 millones de personas en todo el mundo. Entre los adolescentes, su prevalencia parece estar aumentando, pasando del 8,7% en 2005 al 11,3% en 2014. Los primeros síntomas suelen aparecer durante la adolescencia, por lo que puede ser un buen momento para identificar la enfermedad o modificar los factores de riesgo. La actividad física puede ser una buena herramienta para combatirla.

La mayoría de los estudios realizados con anterioridad se habían centrado en la actividad física de intensidad moderada a vigorosa, como caminar rápido o el ciclismo. Sin embargo, en este estudio se sugiere que el sedentarismo está asociado con el riesgo de sufrir depresión en la edad adulta, por lo que se hace más necesario, si cabe, promover hábitos de vida saludables entre los más pequeños. Evitar la elevada exposición a las pantallas y acompañarles durante la práctica de ejercicio, convirtiéndolo en una actividad divertida, son algunas de las recomendaciones de los especialistas para reducir las altas tasas de sedentarismo.

Para acceder al estudio (en inglés), pinche aquí.